1671840312 David Iriarte tocado Liga Endesa Equilibrismos fisicos hasta la llegada

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Pete Tomàs (19) y David Iriarte cierran un rebote en el partido del Covirán en la cancha del UCAMMurcia. / Javier carrión / la verdaD

La mermada plantilla rojinegra hace encaje de bolillos para paliar la ausencias. Además, David Iriarte sufre una pequeña lesión en el cuádriceps

Mientras el trabajo en los despachos es incesante a la caza y captura del necesario refuerzo interior que ansía la plantilla del Covirán Granada para recuperar su máximo nivel competitivo, el equipo rojinegro sigue trabajando para recuperar las sensaciones perdidas y con las que enamoró a propios y extraños en el arranque liguero.

Más allá de la racha de cuatro derrotas consecutivas –Barça, Betis, Casademont Zaragoza y Valencia Basket–, preocupa la sensación de escasa competitividad que ofrece el equipo, azotado por los problemas físicos en sus hombres grandes. De hecho, parte de la tarea del cuerpo técnico en estos días pasa por, además de lograr un paso al frente de jugadores hasta ahora ‘secundarios’, cambiar el estilo de juego de un equipo cuyas armas, a día de hoy, son radicalmente diferentes a las del salto inicial de la temporada en Fuenlabrada.

Un proceso que no está resultando sencillo, pues la vorágine de resultados quizá no ayuda a ver las cosas con perspectiva. En ese sentido, lo que resulta muy positivo es el hecho de que los rojinegros aún dispongan de margen respecto al furgón de cola de la Liga Endesa, con dos y tres victorias de margen con los hasta cinco equipos que parecen llamados a jugarse las castañas de la permanencia con el equipo que entrena Pablo Pin.

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Iriarte, tocado

Pero emulando al refranero, parece que al Covirán le crecieran los enanos. O por lo menos, que se le cayeran los gigantes. El último percance afecta al capitán David Iriarte, que acabó lastimado el entrenamiento del pasado jueves en el Palacio de los Deportes, tras notar un dolor en el cuádriceps. De resultas, el pívot mallorquín se encuentra a la espera del diagnóstico definitivo de su patología, que inicialmente se temió que pudiera apartarle de la actividad durante algunos partidos, lo que situaría al equipo granadino en un escenario casi fantasmagórico en la zona, con ‘Petit’ Niang y Ramón Vilà como únicos pívots, más la aportación que pudieran dar en el puesto de ‘4’ tanto Jacobo Díaz como Pere Tomàs.

Sin embargo, la buena noticia sobre el interior balear estriba en que las pruebas diagnósticas a las que fue sometido en el día de ayer no revelaron una lesión de gravedad, lo que supuso sin duda un alivio en el organigrama rojinegro. En todo caso, tras el descanso que la plantilla tendrá durante el fin de semana, el capitán del Covirán volverá a repetirse los test a fin de afinar mejor la situación exacta de su pierna. Y es que, aunque el peor escenario parece en principio descartado según indican fuentes del club, lo cierto es que este nuevo percance podría obligar a Iriarte a descansar, cuanto menos, en el desplazamiento a Tenerife, mermando aún más el poderío interior de un equipo ya muy tocado en la pintura tras las bajas de larga duración de Luke Maye y Cristiano Felicio y las dificultades que se está encontrando para hallar un sustituto, como poco temporal, de garantías.

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Todorovic

Mientras, el que avanza a pasos lentos es el serbio Dejan Todorovic. El balcánico, que solo ha podido jugar unos minutos esta temporada en la visita del Covirán al Unicaja, se encuentra ya completamente recuperado a su lesión en el sóleo –así lo confirman las pruebas de imagen–, lo que le ha permitido recuperar paulatinamente el trabajo con el resto, toda vez que sus sensaciones siguen sin ser las mejores.

El alero rojinegro ha hecho ya incluso parte del trabajo colectivo con el resto de sus compañeros en esta semana, por lo que los plazos para su reincorporación se mantienen en los últimos que dijo Pablo Pin días atrás, calculando el regreso del serbio para el encuentro del 3 de enero en el Palacio de los Deportes ante el Baskonia. Incluso, si todo fuera muy bien, podría entrar en la convocatoria para viajar la próxima semana a Tenerife y, como poco, realizar el trabajo previo al encuentro a modo de test de mayor intensidad.

Sin embargo, dados los precedentes con Todorovic, nadie se atreve a lanzar las campanas al vuelo con él, ni en lo referente a su fecha de regreso ni tampoco en cuanto al nivel máximo que podrá alcanzar y al tiempo que será capaz de mantenerlo. Prácticamente todo en torno al oriundo de Mrkonjic Grad sigue siendo una gran incógnita por resolver.

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