Mercadona ha comenzado el traslado de un primer grupo de 250 trabajadores a sus nuevas oficinas ubicadas en el municipio de Albalat dels Sorells (siete kilómetros al norte de la ciudad de Valencia). La mudanza culminará a finales de 2025 con la ubicación definitiva de 2.600 personas en «un nuevo espacio de trabajo más sostenible y que fomenta la colaboración», según la cadena de supermercados presidida por Juan Roig. Las instalaciones contarán con 15 ambientes para el trabajo de sus empleados «por barrios».
A lo largo de los próximos tres años, los trabajadores, que actualmente desempeñan su actividad en diferentes centros ubicados en otros municipios valencianos como Paterna y Tavernes, se incorporarán de forma progresiva a estas nuevas instalaciones en las que la compañía tiene previsto invertir un total de 200 millones de euros distribuidos en las tres fases del proyecto.
La primera fase del proyecto de Albalat dels Sorells comenzó en 2014 con la inauguración de su Centro de Procesos de Datos (CPD) y del de Servicios, con una inversión de 45 millones de euros.
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La segunda fase se inició en 2018 con la inversión de unos 100 millones de euros en la puesta en marcha de la construcción de estas nuevas oficinas, que empiezan ahora a recibir trabajadores y que se prevé que finalice en 2024. Y la fase 3, con una inversión aproximada de 55 millones de euros, está previsto se inicie el próximo año hasta 2025 centrada en la construcción y puesta en marcha de un nuevo Centro de Coinnovación.
«Las nuevas oficinas, cuyo diseño está a cargo del estudio ERRE Arquitectura, representan una oportunidad para seguir avanzando en la digitalización de la compañía, al tiempo que fomentan la colaboración, la creatividad y el intercambio de conocimiento entre las distintas partes del proceso, favoreciendo la ejecución y la agilidad en la toma de decisiones», explicó la compañía.
Se trata de oficinas «pensadas a la medida de las necesidades y experiencia de los trabajadores». «Se han diseñado hasta 15 tipologías de ambientes distintos que cada trabajador podrá elegir en función de la tarea que tenga que desempeñar cada día. Con esta nueva fisonomía se pasa del modelo tradicional de despachos al de espacios abiertos, mucho más colaborativo y creativo», detalló.
«Se deja de trabajar por departamentos y se apuesta por trabajar por ‘barrios’ (áreas cuyos trabajadores comparten un mismo proceso independientemente del departamento al que pertenezcan)», añadió la empresa. Para la definición de la nueva forma de trabajar se ha contado con el proveedor especialista BICG.
Además, el edificio cuenta con «soluciones tecnológicas innovadoras, como un sistema ágil de proyección inalámbrica para compartir información o el control de distintos espacios o servicios a través de una aplicación móvil».
Los trabajadores dispondrán también de «mejores servicios comunes, como un amplio y funcional comedor con una oferta gastronómica variada, saludable y de calidad, y el Kiosko Hacendado, un área de vending con una selección del surtido existente en los supermercados». Una vez acabada la Fase 2, las oficinas de Albalat contarán con un parking propio para la plantilla.
Las nuevas oficinas contarán además con «grandes patios ajardinados internos y una orientación este-oeste, lo que no solo genera un aprovechamiento máximo de la luz solar y una reducción del consumo eléctrico, sino que redunda en un mayor confort de los usuarios y contribuye a absorber la contaminación y producir oxígeno».
La compañía, además, está utilizando materiales de producción local, es decir, de kilómetro 0, lo que reduce al máximo su huella de carbono. El proyecto cuenta con una instalación de 380 placas fotovoltaicas y un sistema de gestión inteligente del edificio para garantizar el uso eficiente y racional de los recursos.
A su vez, la compañía incorporará soluciones de movilidad sostenible para el conjunto de la plantilla que desarrolle su actividad en Albalat dels Sorells en colaboración con el programa de aceleración de Lanzadera.
Consistirán en el fomento del uso del coche particular compartido, a través del proveedor HoopCarpool; el uso de la bicicleta, con la colaboración de Kleta; o de un servicio de autobús de empresa, que proporcionará BusUp. Además, las nuevas instalaciones contarán con un parking de vehículos eléctricos (con plazas de recarga en el sótano), patinetes y bicicletas