Cinco preguntas incmodas que deberas hacer a tu pareja (aunque te cueste un disgusto)

Conocemos muy poco a las parejas. Por mucho tiempo que llevemos juntos, se nos escapan cosas, algo totalmente inevitable, ya que su mundo interior no lo llegaremos a conocer nunca al 100%. Si nosotros mismos no alcanzamos ese porcentaje de autoconocimiento, creer que podemos conseguirlo con los dems es una total fantasa. De ah que lo de la media naranja sea un mito, pero lo de ser naranjas completas tambin, la plenitud incluye las relaciones afectivas, aunque no nos sirva cualquiera.

Pensar que conocemos al otro, nos genera una inevitable sensacin de estabilidad o control, totalmente ilusorio. Por eso se habla tanto sobre la importancia de la confianza en pareja. Pero, acaso la estemos alimentando con la esperanza o las expectativas que depositamos en quien nos gusta o amamos, sin confirmacin alguna por criterios de realidad? Es cierto que, cuando no se tiene la totalidad de la informacin o el mensaje es confuso, tendemos a rellenar eso vacos de manera automtica para dotar de significado el mensaje. As, los denominado sesgos cognitivos, nos gestionan la incertidumbre y ofrecen el equilibrio que necesitamos.

UNOS COMPLETOS DESCONOCIDOS

S, nos ayudan, pero a cambio de qu? De vivir en la inopia. Con lo felices que nos hace la ignorancia a veces. Ojos que no ven, corazn que no siente… Ahora, porque ya te enterars y la cada, desde el castillo que te has montado en el aire, puede no ser muy divertida.

Odo en consulta: «Estoy viviendo con un desconocido! Siete aos juntos y me entero ahora te gusta hacer…eso?». Eso es ser infiel, te pongas como te pongas! «Si lo llego a saber no me caso contigo». Esto es tan solo una muestra de los que sucede en terapia de pareja. Bsicamente, dos personas, que creen conocerse mucho, descubren a su pareja, por fin. Pero cmo puede ser esto!

Pues porque quiz no os habis hecho algunas preguntas importantes pero incmodas. Lo s, cuando se inician las relaciones queda raro preguntar ciertas cosas ntimas y preferimos ir descubriendo, poco a poco a nuestro ser amado, a pasar del riesgo que con lleva.

Tampoco queremos enfrentarnos a determinadas cuestiones que quiz nos bajen de la nube del enamoramiento, demasiado pronto. O puede que, en ese estado de enajenacin mental transitoria, aparentemente tan ideal, no quieras aceptar todo «lo chungo» de tu pareja; ocurrindole algo parecido a la otra parte, porque nadie se libra de su porcentaje aterrador. El amor fluye y las risas no faltan, para qu preocuparse ahora, mejor vivir el presente, pensamos.

LO QUE DEBEMOS SABER

Pero hemos de ocuparnos de determinadas cuestiones si no queremos pasar la vida en pareja preocupados. Nada como preguntar para salir de dudas. En las primeras citas ya lo hacemos, preguntando sobre sus gustos y aficiones: Cul es tu comida favorita? Cine o teatro? lees? Fumas o bebes alcohol? Haces ejercicio? Estudias o trabajas? lo clsico, vaya. Pero poca gente pregunta por cuestiones ms profundas para determinar si la relacin es posible, a corto o largo plazo.

Conocer lo que compartimos y lo que no es fundamental. Y dentro de estos ltimos, lo que es negociable o no. Pues esos innegociables, quiz puedan suponer una renuncia por la otra parte o un esfuerzo innecesario, y daino para ambos, intentado que cambie su forma de sentir, pensar o querer. Ya sea por arte de magia o por nuestro empeo insaciable, agobiante e irrespetuoso de que as sea. Lo conseguir!, creers. Pues no.

Para que la responsabilidad afectiva sea efectiva y la sexualidad placentera sea disfrutada por ambos, os facilito algunas preguntas que, quiz, an no le has hecho a tu pareja, propuestas por la Dra. Jeka Mndez, mdico sexloga:

1. Qu prcticas sexuales te gustan y cules no? Qu estaras en disposicin de probar?

Empezamos calentito y con risas, pues puede dar para muchas. Tampoco hay que descubrir todo, o nada, si no existe la confianza suficiente an, pero indica que es una cuestin importante y que sera bueno conocer el mximo para beneficiar las relaciones sexuales de los dos.

La Dra. Mndez indica que «abrir este espacio es sumar a la intimidad, invita a cada uno al autoconocimiento y a la reflexin del placer propio, para poder ser compartido», adems, «se establecen relaciones desde la confianza, el consenso y responsabilidad, dejando sitio para la curiosidad, la innovacin, fantasas, deseos…» y lo que surja.

2. Qu cuenta como infidelidad para ti?

«Se entiende por infidelidad la ruptura de acuerdos en una relacin», segn la doctora. Sin embargo, tambin asociamos habitualmente a la utilizacin de los genitales y determinadas practicas sexuales. «No hablamos abiertamente sobre dichos acuerdos, desconociendo los lmites del otro, centrndonos en un modelo nico de relacin», detalla la experta.

3. Cmo podramos llevar nuestra relacin si existe o existiera discrepancia del deseo sexual?

Para Jeka, «Asumir que el deseo sexual es el mismo en cada una de las partes de la relacin o permanecer igual a travs del tiempo, no solo corta la posibilidad de cultivar el deseo dentro de la relacin, sino que pudiese ser un punto de partida para la existencia de otros problemas que afecten de manera negativa».

4. Conoces tu estado de salud sexual?

Una cuestin fundamental que muy pocas parejas se comentan. «Mas all de la curiosidad y/o morbo que pueda despertar el conocer la vida sexual del otro, no es algo que sume a la relacin en s, el compartir esta informacin es una decisin muy personal», comenta la doctora. «Por otra parte, algo que s es importante es hacernos responsables de nuestra salud, por inters propio y por cuidar con quien se comparte sexualmente».

5. Deseas crear tu propia familia? Has pensado cmo sera su crianza?

Esto quiz se pregunte ms pero, lejos de ser una prueba de aptitud de maternidad o paternidad, pues la realizad supera la ficcin siempre con esto de la descendencia, es una manera de conocer sus deseos y saber si existen intenciones similares a las tuyas. Sobre todo si este aspecto lo tienes muy claro y es una cuestin innegociable para ti, o para la otra parte.

Ahora completa con estas ideas con las preguntas que te mueven a ti. Sera interesante, al menos, conocer algunas cuestiones antes de lanzarte a una historia ms duradera, con objetivos comunes y de gran implicacin emocional.

Aunque sea un trabajo de por vida aquello de conocernos y conocer a los dems, hay cuestiones que han de tratarse, teniendo en cuenta siempre que el cambio es lo nico constante la vida. Por este motivo, no estara de ms, realizar una batera de preguntas cuando la relacin inicia y volver a contestarla de vez en cuando, cada ao, por ejemplo, incluyendo otras que quiz ni nos cuestionamos al inicio.

Pero atencin, no tomemos esto como si de una oposicin se tratase. La idea es comunicarse, entenderse y aceptarse, si se puede y quiere. Estn tan de moda las «Red flags» o banderas rojas, a las que solemos considerar excluyentes, que podemos gritar: Next! a la persona que nos gusta, si descubrimos que es demasiado callado, cuando t tambin pecas de eso, o de todo lo contrario, no baja la taza del vter o no est en el bando de Shakira. Detectar lo que no compartimos, nos permitir crecer como pareja asimilando que no somos iguales, pues cada persona es nica, y an as nos podemos amar y construir algo bonito. Abrazando esa parte de incertidumbre que acompaa a los afectos, cuando nadie sabe lo que sentir maana, ni se puede controlar.

Tomemos entonces el propsito de conocer a nuestra pareja como una misin de largo recorrido. Y, por supuesto, si las banderas rojas son muy chungas… Bye, bye!

*Ana Sierra es psico-sexloga www.anasierra.es

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