Tanto Mohamed Katir como Joshua Cheptegei ya se habían encargado de avisar en la previa. Los dos coincidían, era muy complicado plantearse el objetivo de batir el récord de la San Silvestre Vallecana en este 2022. Cada uno tenía una razón, el africano venía de una reciente lesión y con una preparación justa, mientras que el español no se desenvuelve todavía a la perfección en los 10.000 metros.
Se esperaba un mano a mano entre Mohamed Katir y Joshua Cheptegei y la San Silvestre Vallecana no defraudó en absoluto. Los dos favoritos se batieron en un precioso duelo por la victoria y dejaron una batalla muy dura que comenzó a decidirse a falta de unos 2 kilómetros para la llegada en el Estadio de Vallecas.
El ugandés, mucho más especialista en esta distancia, cumplió con los pronósticos y terminó imponiendo su ley. No llegaba en su mejor momento, pero aún así desprende una calidad a raudales que le basta y le sobra para ganar la San Silvestre Vallecana con autoridad y firmar la tercera mejor marca en la Historia de la carrera.
En la categoría femenina, el triunfo fue a parar a manos de Prisca Chesang, que completó la fiesta de Uganda en Vallecas. La fondista también deslumbró y voló sobre las calles de Madrid porque llegó a firmar otra de las mejores marcas de toda la Historia de la prueba en féminas.
La batalla
La carrera no tardó en romperse, algo lógico teniendo en cuenta el nivel de los grandes favoritos a la victoria. En la previa, Katir había dicho que Cheptegei era un ‘bicho’, y desde luego que sus palabras no eran ni mucho menos fruto del azar. Con apenas 3 kilómetros disputados, estas dos cabezas visibles se quedaron en un pequeño grupo de cuatro atletas entre los que estaba también Jesús Ramos.
El atleta español demostró tener unas buenas piernas y, a un ritmo infernal, consiguió aguantar a Katir y a Cheptegei casi hasta el ecuador de la carrera. El paso por el kilómetro 3 dejó un crono de 7:59, así que se iba volando en busca de la línea de llegada en el Estadio de Vallecas, donde ya aguardaba el público impaciente esperando a levantarse de sus asientos.
Al paso por Atocha, la carrera estaba clara que se iba a decidir entre Katir y Cheptegei. El africano marcaba el ritmo con Mo Katir mostrándose a su lado de manera muy valiente, como queriendo decir ‘aquí estoy yo para lo que haga falta’. A falta de 3 kilómetros para la llegada, el ugandés comenzó a abrir gas poco a poco. Daba la impresión de que por momentos subía el ritmo, pero que su rival aguantaba no sin sufrimiento.
Al pasar por el kilómetro 7 con un crono de 18:35, quedaba claro que la carrera estaba siendo dura. Tanto, que un poco más adelante el campeón olímpico cambió el ritmo de manera definitiva. Después de mirar su reloj en varias ocasiones, Cheptegei empezó a abrir unos centímetros de ventaja sobre Katir, que poco a poco se fueron convirtiendo en metros.
En solitario se marchó el ugandés a por los kilómetros finales de la carrera, consciente poco a poco de que batir el récord era ya una utopía. Se dio el gusto, eso sí, de entrar en Vallecas con tiempo como para saborear el momento y para disfrutar de la victoria. Mo Katir entró unos segundos después y le dio un gran abrazo a su rival, momento en el que compartieron e intercambiaron sonrisas. Completó el podio un gran Jesús Ramos.
Poco después entró Prisca Chesang. Aquí, la ugandesa apenas tuvo rival porque entró con mucha ventaja en Vallecas mientras el público la vitoreaba desde las gradas. Firmó una de las mejores actuaciones de siempre en una prueba que volvió a dejar un gran espectáculo.