Adis a las nieves del Kilimanjaro

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La visin ms sorprendente que descubren los cientos de personas que todos los aos suben a la cima del Kilimanjaro sucede a pocos metros del pico Kibo, su punto culminante, a 5.895 metros sobre el nivel del mar. Para alcanzarlo hay que recorrer un largo trecho por el borde del gigantesco volcn. Es cerca del final de la tirada, cuando se descubren las nieves del Kilimanjaro. Mejor dicho, sus glaciares o, mejor dicho an, los restos que quedan de ellos.

Unas decenas de metros apartado de la cresta, el frente superior de los hielos es una muralla inmaculada que en algunos puntos alcanza 20 metros verticales de altura. Antes del 2000, esa masa de hielo cubra la cima de la montaa. Hoy cada da que pasa su borde est ms abajo. Durante la ascensin, a lo largo de seis jornadas, la nieve y el hielo brillan por su ausencia, a pesar de la altitud por la que transita la ruta. No se vislumbran hasta lo ms alto. Slo all, donde las temperaturas son ms bajas y los vientos ms fros, resisten los ltimos hielos de la montaa ms alta de frica.

Dentro de menos de tres dcadas, en 2050, no quedar el menor rastro de ellos. Es lo que aseguran los datos ofrecidos por la UNESCO en su ltimo informe, Glaciares del Patrimonio Mundial. Centinelas del cambio climtico, elaborado en colaboracin con la Unin Internacional para la Conservacin de la Naturaleza, UICN.

El informe destaca un derretimiento acelerado de los glaciares presentes en 50 lugares del Patrimonio Mundial. Un total de 18.600 ros de hielo que cubren un rea de 66.000 kilmetros cuadrados, aproximadamente el 10% del rea glaciar total actual del planeta.

Entre ellos, por su posicin bajo el Ecuador, los glaciares africanos y andinos estn a la cabeza de esta extincin anunciada. Tambin se vern afectados monumentos naturales como el Everest, la montaa ms elevada del planeta, los glaciares de Alaska y las masas de hielo antrticas, bajo las que acaba de constatarse la existencia de grandes ros de agua en constante aumento, debido al aumento de las temperaturas.

El informe denuncia que, desde el ao 2000 y debido a las emisiones de CO2, cada ao se derriten 58.000 millones de toneladas de hielo. La cantidad es equivalente al gasto anual de agua conjunto de las poblaciones de Espaa y Francia. Semejante volumen es responsable de que el aumento global del nivel de los ocanos haya subido poco menos del 5 por ciento desde entonces.

La mitad de la poblacin mundial depende directa o indirectamente de los glaciares. Proveedores de agua para uso domstico, la agricultura y como fuente de energa, son laboratorio cientfico privilegiado. Lugares sagrados para las comunidades locales, tienen un destacado papel en la cultura humana y constituyen un poderoso atractivo para millones de turistas en el mundo.

En torno al 50 por ciento de la biodiversidad del planeta se localiza en las reas de influencia que riegan las aguas procedentes de los glaciares. Estas masas de hielo tienen un papel de gran importancia en la regulacin global del clima. En especial los hielos de la Antrtida y Groenlandia, reguladores de la circulacin de las aguas de los ocanos. La Unesco considera a los glaciares como uno de los ms certeros indicadores del cambio climtico actual.

Segn los datos del informe, los ltimos glaciares africanos, situados en los montes Kilimanjaro, Kenia y Ruwenzori, las tres mayores eminencias del continente, son los primeros que desaparecern. Smbolos del cambio climtico global, con ellos se irn las ltimas nieves que resisten en frica.

Les siguen en la lista los glaciares ecuatoriales de Amrica del Sur, en especial los peruanos del Parque Nacional Huascarn y los del Parque Nacional Los Alerces, en Argentina. Estos ltimos viven una situacin dramtica, con la reduccin de ms del 45 por ciento de la masa que tenan en 2000.

No tendrn mejor suerte un gran nmero de glaciares del continente norteamericano, como los del Parque Nacional Yosemite, en Estados Unidos, y los del Waterton Glacier International Peace Park, en Canad. Los glaciares europeos, con los del Pirineo a la cabeza, seguidos por todos los ros de hielo de los Alpes y los Dolomitas, se esfumarn, siempre segn el citado informe.

El deshielo anunciado se extender hasta los ltimos rincones de la Tierra. Como en los glaciares de Te Wahipounamu, en la remota Nueva Zelanda, as como los de la Antrtida, donde se suceden continuos desprendimientos al ocano de las mayores porciones glaciares de la historia.

El informe de la Unesco da por casi definitivamente condenados a la tercera parte de todos aquellos glaciares, aunque seala que todava es posible salvar los otros dos tercios. Siempre que las temperaturas globales no superen 1,5 centgrados, respecto a las que se registraban antes del periodo preindustrial.

1,2 grados ms de temperatura

No parece sencillo el reto, si se tienen en cuenta las cifras registradas. Segn el Servicio de Cambio Climtico de Coprnico, los ltimos cinco aos han sido los ms calurosos de los ltimos dos siglos. Solo desde 2015, el promedio global de las temperaturas ha aumentado 1,2 C respecto a las que se registraban cuando las mquinas empezaron a mover la industria. Es por todo esto por lo que la Unesco ha calificado la conservacin de los glaciares como ‘un gran desafo’ para la Conferencia sobre el Cambio Climtico, COP27, celebrada en Egipto.

En Las nieves del Kilimanjaro, una de las ms celebradas obras del premio Nbel Ernest Hemingway, la blanca extensin que cubre el techo de frica y da nombre al escrito no aparece hasta las ltimas lneas de la obra, cuando Harry, el protagonista, enfermo de gravedad, sobrevuela la montaa en la avioneta que le saca de la sbana. Es muy posible que en tres dcadas esas nieves solo perduren en la novela.

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